El Consejo de Gobierno ha tomado nota de la solicitud de ayuda del Ministerio de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural para promover productos agrícolas y alimentarios incluidos en regímenes de calidad como Denominaciones de Origen Protegidas (DOP), Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP), Especialidades Tradicionales Garantizadas (ETG) y las incluidas en la marca “Gusto del Sur”.
A las subvenciones, que ascienden a 3.950.000 euros y se articulan dentro del Plan Estratégico de la PAC española (Pepac) 2023-2027, pueden optar los consejos reguladores, asociaciones y federaciones de entidades agroalimentarias y asociaciones agrarias, fundaciones y organizaciones empresariales del sector, así como agrupaciones de productores sin fines de lucro que participen en un programa de calidad de alimentos.
A través de esta línea de ayuda se persigue la promoción fomentando el consumo consciente y sostenible entre los andaluces, además de facilitar información a los consumidores sobre productos agroalimentarios esenciales para preservar la riqueza cultural, gastronómica y natural de Andalucía, ya que promueven prácticas agrícolas sostenibles, fomentan la biodiversidad y apoyan a las comunidades rurales por su contribución al desarrollo económico local.
Los beneficiarios pueden destinar estos incentivos a campañas publicitarias en medios de comunicación masivos y soportes publicitarios; materiales informativos y promocionales; estudios e informes; catas, degustaciones, presentaciones, promociones en puntos de venta y otros eventos promocionales; participación en ferias, exposiciones y organización de congresos; promoción a través de sitios web y redes sociales; patrocinios, relaciones públicas y misiones comerciales.
El reconocimiento de estos productos no solo protege las tradiciones ancestrales sino que también fortalece la competitividad de Andalucía en el mercado nacional e internacional, consolidándola como un referente en calidad y sabor. Por lo tanto, su acercamiento a los consumidores es una estrategia clave para fortalecer el vínculo entre el productor y el cliente final, ya que permite promover un consumo consciente y sostenible.
Los productos incluidos en un régimen de calidad reconocido y los derivados de agricultura ecológica o producción integrada requieren ciertas técnicas de producción sostenibles y respetuosas con el entorno que los consumidores necesitan conocer, por lo que es necesario acompañarlos con una promoción adecuada que les permita mejorar sus oportunidades de mercado.