Juana Rivas acusa a Arcuri de violencia de género internacional

Juana Rivas ha presentado una denuncia por violencia de género indirecta contra su expareja, el italiano Francesco Arcuri, a quien acusa de «utilizar» a sus dos hijos y «actuar contra ellos» para «hacerle daño»; y solicitó al Tribunal una orden de protección que prohíba a Arcuri acercarse o comunicarse con los tres por cualquier medio.

Los abogados de Juana Rivas afirman que esta es la primera denuncia de este tipo que examinarán los tribunales españoles, mostrando su deseo de que «este debate llegue al Tribunal Supremo» para que se genere «un corpus adecuado de jurisprudencia sobre una cuestión de enorme extensión». «hasta ahora descuidado.»

Esta denuncia de violencia indirecta se formuló en la modalidad de delito de violencia psicológica ordinaria y de delito de lesiones, según consta en el documento, al que tuvo acceso Europa Press y remitido a la Oficina de Registro y Distribución para ello. para ser entregado al tribunal correspondiente.

En él cuentan cómo Juana Rivas «huyó de la violencia de su expareja y entró en un laberinto legal que duró más de ocho años y debe terminar ya», según afirman. Señalan que desde 2016 se han producido una serie de episodios de violencia contra Juana (directamente contra ella o a través de sus hijos), culminando con los ocurridos el mes pasado, que individualmente «pueden no parecer relevantes, pero cuando visto ‘Juntos forman parte de una estrategia sofisticada y destructiva utilizada por Francesco Arcuri con dos objetivos: subyugar a su expareja y a sus hijos; y generar una situación de control e imposición permanente de su voluntad».

Entre sus peticiones, los abogados de Rivas piden que la declaración de Arcuri sea tomada como imputada, que su hijo menor, Daniel, sea examinado y que el Instituto de Medicina Legal elabore un informe sobre «las consecuencias psicológicas» que tienen estos hechos. causado en Juana Rivas.

«AMENAZAS Y ACOSO TELEFÓNICO»

Los hechos denunciados se refieren al período comprendido entre el 28 de agosto de 2017, cuando Rivas fue obligada a «entregar a sus hijos por la fuerza» a Arcuri, y el día de hoy, cuando -según ellos- «sigue acosándola telefónicamente y». intimidación».

Agregan que durante todo este período Arcuri habría cometido esta supuesta violencia indirecta en Italia, con excepción del período del 22 y 24 de diciembre, cuando «viajó a España para reforzar con su presencia las amenazas realizadas anteriormente» y cuando habría Envió mensajes de madre. de sus hijos informándole que se encontraba en Granada y que «intervendría de inmediato» «si se produjeran episodios de maltrato psicológico contra Daniel».

Afirman que Juana Rivas sufrió violencia psicológica mientras vivía en España, «por ser ciudadana española» y por tanto el resultado del presunto delito cometido por Arcuri se habría producido en nuestro país.

Junto a ello, la denuncia recoge también las denuncias de abusos presentadas por Rivas en Italia y se hace eco de la acusación de la Fiscalía General de Cagliari contra Arcuri por presuntamente abusar de sus dos hijos, «sometiéndolos a violencia física, humillaciones, insultos y amenazas». generando en ellos severos estados de ansiedad y temor por su seguridad.

A estas se suman las supuestas amenazas de Arcuri a Juana Rivas a través de los dos niños, provocando una «alteración lógica» en ellos «y en la madre, que sufre las consecuencias de dos maneras: primero, la preocupación y el miedo que sus hijos deben sufrir. episodios y, en segundo lugar, el miedo a que estas amenazas se materialicen», advierten.

Los abogados de Rivas creen que cuando esta denuncia sea recibida y distribuida en alguno de los juzgados de violencia sobre la mujer del partido judicial de Granada -sólo hay dos en la capital-, ambos magistrados del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 2, quién es cargado. a presentar todas las denuncias que le lleguen en este caso «sin un mínimo de instrucción» – y como el juez del juzgado número 1, que está en desgracia por firmar un manifiesto de apoyo al primero.

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