La Universidad de Granada (UGR) se ha comprometido con el Departamento de Universidad, Investigación e Innovación a avanzar en materias relacionadas con la actividad docente, plantilla, internacionalización, competencias lingüísticas de los estudiantes, transferencia de conocimiento, transformación digital, cultura emprendedora o eficiencia energética. Así consta en el contrato programa que el concejal José Carlos Gómez Villamandos firmó con el rector Pedro Mercado, con el objetivo de optimizar la gestión de recursos procedente de la Junta de Andalucía, aumentar la competitividad y los resultados de la mencionada institución y llevar a cabo reformas estructurales.
Este convenio con la UGR tiene asociado un artículo de 27,17 millones de euros que se encuadra dentro de los 382,1 millones asignados por el Departamento de Universidad a la institución a través del modelo de financiación para el ejercicio 2024. Además, su aportación por parte del Consejo está ligada a la consecución de resultados en los objetivos previamente acordados entre ambas partes. El cumplimiento del documento se producirá cuando se alcancen al menos el 90% de los objetivos y medidas previstas.
Los contratos programa son una herramienta novedosa que se pone en marcha, por primera vez, en instituciones académicas universitarias públicas de Andalucía. Dentro del modelo de financiación universitaria 2023-2027 y perseguir la homogeneización de la calidad del servicio y la eficiencia en el uso de los fondos. Se acuerdan anualmente con cada una de las instituciones académicas públicas y son de dos tipos: estructurales y estratégicos.
Independientemente de esta clasificación, esta planificación abarca un amplio abanico de aspectos, desde la adaptación de infraestructuras, la estabilización y promoción del personal o el apoyo a los estudiantes hasta la mejora de la docencia, la atención a la diversidad o el fomento de la internacionalización y el emprendimiento, pasando por el fomento de la cultura y el deporte. También busca promover la investigación y la transferencia de conocimiento. Teniendo en cuenta todos estos apartados, los documentos prevén entre diez y veinte parámetros mensurables para las universidades públicas, con evaluación comparativa, que van acompañados de propuestas y medidas proporcionadas por el Departamento de Universidad en los casos en que sean necesarias.
El texto de la UGR, limitado al curso académico 2023-2024, tiene 23 indicadores distribuidos entre contenido estructural y estratégico reservando gran parte de los puestos de plantilla, 21,08 millones, a la parte estructural, que está directamente relacionada con la financiación básica armonizada, otro eje esencial del modelo de financiación de la universidad que se relaciona con el personal, el funcionamiento y el mantenimiento del campus. En el apartado estructural se detallan hasta diez parámetros, en los que en general se obtienen resultados satisfactorios, aunque en algunos de ellos la entidad necesita realizar mayores esfuerzos dentro de las pautas establecidas.
Armonización de la carga lectiva del profesorado y de créditos optativos
En el contrato estructural programa, la Universidad de Granada deberá acercarse a los valores docentes medios impartidos por el profesorado del sistema universitario público andaluz, que actualmente corresponden a 160 horas por año académico. La dedicación de este personal a la UGR es algo inferior, concretamente, de 158,3 horas. También se alcanzó un acuerdo para armonizar con el resto de universidades el ratio de créditos optativos que deben cursar los estudiantes de grados y másteres hasta 2027, pasando de un valor de 2,63 a uno igual o inferior a 2,3. A esto se suma el compromiso de reducir la proporción del crédito personal en las carreras de grado.
También será necesario incrementar ligeramente la proporción que mantiene entre el personal técnico, de gestión, de administración y de servicios, es decir, el PTGAS, y el personal docente e investigador, el denominado PDI. El valor promedio se fijó en un afiliado del PTGAS por cada dos PDI, y la UGR arroja un resultado de 1,76. También debe aumentar la proporción de los grupos A1 y A2 (el nivel más alto de la escala de funcionarios) entre los recursos humanos asignados a tareas de dirección, administración y servicios hasta alcanzar un nivel de representatividad del 25%, teniendo en cuenta que el punto de partida es el 20,29%.
Al margen de estos aspectos en los que se observan pequeñas desviaciones, la Universidad de Granada respeta mucho lo aprobado para la carga lectiva del profesorado no permanente, que no supera el 37%. Asimismo, esta institución académica respeta la ratio de horas lectivas reconocidas al profesorado para la gestión de trabajos finales de grado y máster (TFG y TFM) y de créditos de TFG y TFM, manteniéndola por debajo del valor medio del 0,75. También aporta datos satisfactorios en el criterio que mide la orientación de prácticas externas por parte del profesorado, ya que registra un valor inferior o igual a 0,5 en relación a los créditos asignados a este tipo de prácticas.
En cuanto a los indicadores bibliométricos de las publicaciones científicas, que están relacionados con la calidad de la investigación, el campus de Granada supera ampliamente la referencia establecida por el Departamento de Universidad, al tener un porcentaje del 99,3%, muy por encima del objetivo del 75%. Esta sección utiliza indicadores estandarizados de publicaciones, citas y acuerdos, contratos y patentes establecidos para este fin. Por último, el documento reserva otra variable mensurable a la recaudación de fondos de investigación y transferencia en las distintas convocatorias autonómicas, nacionales, europeas o internacionales, a la que destina una cantidad media de 5,92 millones de euros, cantidad que la UGR casi duplica, según su nivel de atracción de recursos se cuantifica en 11,38 millones.
Impulsando la internacionalización, la digitalización y el emprendimiento
A su vez, el contrato del programa estratégico, al que están asociados 6,08 millones de euros, profundiza en la calidad del servicio prestado, con la implementación de 13 objetivos y medidas. Entre ellos, adquiere especial relevancia el fomento de la internacionalización de los estudiantes de máster, a través del desarrollo de dobles y múltiples titulaciones internacionales. Para ello, el Consejo de Administración y la UGR han acordado incrementar progresivamente estas enseñanzas hasta 2027.
El texto firmado también prevé una apuesta estratégica que pasa por el impulso de proyectos de investigación que conduzcan al desarrollo de nuevas tecnologías, aplicaciones y servicios basados en la inteligencia artificial. En este sentido, la institución granadina se compromete a poner en marcha al menos 20 iniciativas durante la vigencia del modelo. En cuanto a las competencias lingüísticas, el Departamento Universitario se ha marcado como objetivo que esta universidad consiga que en 2027 el 15% de sus estudiantes curse asignaturas en una lengua extranjera.
Para avanzar en la digitalización y la simplificación administrativa, la UGR seguirá optimizando su sede electrónica para mejorar al menos un 30% de los trámites basados en solicitud genérica mediante la implementación de formularios específicos y la automatización de la gestión. Para mejorar la eficiencia energética, la Universidad de Granada ha acordado con el Ayuntamiento instalar y aplicar un sistema de gestión y control en diez edificios.
La transferencia de conocimiento con empresas y entidades externas constituye otro de los ejes medibles del contrato programa estratégico, planteándose como objetivo una media anual de 500 contratos de transferencia, siendo el importe medio anual de al menos siete millones de euros. Para fortalecer la cultura emprendedora dentro de esta universidad, entre otros objetivos, se establecen la activación de cinco programas formativos, la aceleración de 15 iniciativas universitarias o la creación de un concurso de ideas, startups y spin-offs, entre otros.
Modelo de financiación
Los contratos programa son uno de los ejes básicos para la implementación del modelo de financiación de las universidades públicas andaluzas, que en 2024 supuso una transferencia inicial de 1.685,57 millones de euros -más del 23% respecto a 2018-, por los que la UGR obtuvo 382,08 millones. Para 2025, el aporte aprobado para todo el sistema se cuantifica en 1.726,4 millones, lo que implica un incremento del 26% respecto a 2018.
Este sistema de planificación y distribución de recursos, aprobado en septiembre de 2023, se implementó plenamente el año pasado y está estructurado en cuatro categorías amplias: financiación básica armonizada, financiación basada en resultados, financiación de proyectos estratégicos y financiación de igualación.
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